Iriarte, Ignacio
| Especialidad | Pintor |
|---|---|
| Nacimiento | 1621 Azpeitia (Guipúzcoa, País Vasco) |
| Fallecimiento | 1670 Sevilla (Andalucía) |
| Cronología | XVII |
| Ciudad de trabajo | Sevilla (Andalucía) |
| Ubicación en el diccionario | Tomo 2, Página 312, Letra Letra I, Grupo Grupo IR |
| Referencia bibliográfica | *D. García López, "Museo del Prado", en Iriarte, Ignacio. Accesible en: https://www.museodelprado.es/aprende/enciclopedia/voz/iriarte-ignacio/9228ebd9-59b9-4feb-9c0d-324bc0fe7a8a (consultado en 05/11/2021) |
Iriarte (Ignacio) pintor. Nació en Azcoitia, provincia de Guipúzcoa, el año de 1620, y fueron sus padres Esteban Iriarte y doña Magdalena Zabala, naturales de la misma villa. A los 22 años de edad pasó a Sevilla con algunos principios de pintura, que había aprendido en su país; entró en la escuela de Herrera el viejo, de quien tomó mucho gusto y manejo en el colorido, pero hizo corto adelantamiento en el dibujo de figuras; y por esto se dedicó a pintar países [ paisajes ] con tal aplicación, que en breve tiempo llegó a hacerlos con sumo gusto y capricho: de manera, que era la admiración de todos los profesores, particularmente de Murillo, que solía decir: “que »Iriarte no podía dejar de pintar los paises por inspiración divina, según lo bien que lo hacia."
Se casó en Aracena el año de 646 con Francisca de Chaves, y restituido a Sevilla quedó viudo dentro de poco tiempo. Volvióse a casar con doña María Escobar el de 49, y se sostuvo con mucho crédito en la ciudad. Fue uno de los principales profesores que establecieron la academia sevillana en 1660, y el primer secretario de ella, nombrado en 11 de enero del mismo. Volvieron a nombrarle en 67, y siguió hasta 69; y no pareciendo desde este último año en las actas de aquel establecimiento, sospecharnos se hubiese ausentado de la ciudad, o hubiese caído enfermo, porque fue muy asistente a dibujar y no falleció hasta el año de 1685.
Sin embargo de los muchos países de su mano, que salieron de Sevilla para los reinos extranjeros, se conservan algunos entre los aficionados de aquella ciudad con gran estimación. Se celebra la delicadeza de las hojas de sus frondosos árboles, la degradación en los lejos, la diafanidad, la elección de los terrenos, la contraposición del claro oscuro, la hermosura de los cielos, la transparencia de las aguas, el ambiente, y un acorde general en todas sus partes.
Son más apreciables los que no tienen figuras, porque no las hacía buenas; y por este motivo un aficionado que le encargo un juego de ellos, le puso la condición de que las había de pintar Murillo. Convino en ello, pues no con Bartolomé, pues quería que este pintase antes las figuras, y que después acomodaría él los países [ paisajes ]. Murillo se enfadó y pintó figuras y países [ paisajes ], de lo que quedó el dueño muy satisfecho.
Archivo del Juzgado Eclesiástico, Manuscrito de la Academia de Sevilla, Palomino.
(Tomo II, pp.312-314)
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Obras actualmente documentadas
| Obra | Técnica | Cronología | Localización actual | Imagen |
|---|---|---|---|---|
| Países (paisajes) - Iriarte, Ignacio | óleo sobre lienzo | 1660-1660 |
