Diferencia entre revisiones de «Meléndez, Francisco Antonio»
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}}'''Menéndez''' (don Francisco Antonio) pintor. Nació en Oviedo el año de 1682: sus padres le enviaron a Madrid al lado de su hermano don Miguel, que estaba aprendiendo el arte de la pintura, con quien tomó unos ligeros principios. Pero como hubiese tenido proporción de que le llevasen a Italia, salió de Madrid en 1699. Después de haber visto las ciudades de Génova, Milán, Venecia, Roma y Nápoles, hallándose en el mayor desamparo y sin protector en esta capital le fue preciso para poder vivir sentar plaza de soldado de infantería española en aquel ejército el año 700. En medio de las guardias y demás ocupaciones aprovechaba los ratos que le quedaban libres en dibujar, pintar, visitar artista, concurriendo a las academias, con lo que logró hacer progresos en la pintura y adquirirse estimación entre las gentes de aquella ciudad. Pero las revoluciones y pérdida de aquel reino le obligaron a dejar aquella residencia, y a trasladarse a Roma, donde siguió sus estudios con tranquilidad. | }}'''Menéndez''' (don Francisco Antonio) pintor. Nació en Oviedo el año de 1682: sus padres le enviaron a Madrid al lado de su hermano don Miguel, que estaba aprendiendo el arte de la pintura, con quien tomó unos ligeros principios. Pero como hubiese tenido proporción de que le llevasen a Italia, salió de Madrid en 1699. Después de haber visto las ciudades de Génova, Milán, Venecia, Roma y Nápoles, hallándose en el mayor desamparo y sin protector en esta capital le fue preciso para poder vivir sentar plaza de soldado de infantería española en aquel ejército el año 700. En medio de las guardias y demás ocupaciones aprovechaba los ratos que le quedaban libres en dibujar, pintar, visitar artista, concurriendo a las academias, con lo que logró hacer progresos en la pintura y adquirirse estimación entre las gentes de aquella ciudad. Pero las revoluciones y pérdida de aquel reino le obligaron a dejar aquella residencia, y a trasladarse a Roma, donde siguió sus estudios con tranquilidad. | ||
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Revisión del 17:28 19 ene 2021
Especialidad | pintor |
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Cronología | XVII-XVIII |
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Ubicación en el diccionario | Tomo 3, Página 114, Letra M, Grupo ME |
Menéndez (don Francisco Antonio) pintor. Nació en Oviedo el año de 1682: sus padres le enviaron a Madrid al lado de su hermano don Miguel, que estaba aprendiendo el arte de la pintura, con quien tomó unos ligeros principios. Pero como hubiese tenido proporción de que le llevasen a Italia, salió de Madrid en 1699. Después de haber visto las ciudades de Génova, Milán, Venecia, Roma y Nápoles, hallándose en el mayor desamparo y sin protector en esta capital le fue preciso para poder vivir sentar plaza de soldado de infantería española en aquel ejército el año 700. En medio de las guardias y demás ocupaciones aprovechaba los ratos que le quedaban libres en dibujar, pintar, visitar artista, concurriendo a las academias, con lo que logró hacer progresos en la pintura y adquirirse estimación entre las gentes de aquella ciudad. Pero las revoluciones y pérdida de aquel reino le obligaron a dejar aquella residencia, y a trasladarse a Roma, donde siguió sus estudios con tranquilidad.
Deseoso más delante de volver a España, abandonó la hacienda que tenía su mujer en Nápoles, y vino con ella y sus hijos a Madrid, donde llegó el día 19 de octubre de 1717. No tardó mucho tiempo en manifestar su habilidad en miniatura, y logró retratar al infante don Fernando, después a Felipe V y su mujer [ Isabel de Farnesio ], y a toda la familia real [ el rey Felipe V y su esposa la reina Isabel de Farnesio, Infante don Luis, Infante don Felipe Pedro, infante don Fernando, infante don Carlos, infante don Felipe, infanta doña María Ana Victoria, ] con aprobación y aplauso de toda la corte, por lo que se le concedió el título de pintor de miniatura de S. M. y AA. Para que volviese a retratarlos cuando conviniese al real servicio; y habiéndose ofrecido retratar a una de las infantas que estaba para irse a casar fuera del reino, pasó al escorial, y pintó dos retratos de S.A. [ Infanta María Ana Victoria, que fue reina de Portugal ] para los brazaletes de la reina. Volvió ha hacer el de todas las personas reales [ el rey Felipe V y su esposa la reina Isabel de Farnesio, Infante don Luis, Infante don Felipe Pedro, infante don Fernando, infante don Carlos, infante don Felipe, infanta doña María Ana Victoria, ] para poner en las joyas y regalos, con que se había de cumplimentar a los embajadores y enviados extranjero, y aunque lo desempeñó con la mayor puntualidad y esmero, no pudo lograr sueldo fijo por el rey.
A pesar de esta desgracia no decayó su celo por el bien público, por el adelantamiento de las bellas artes en España y por el honor de la nación, pues como había visto en Italia los progresos que hacían los jóvenes con el estudio en las academias, se resolvió a escribir e imprimir el año de 726 una representación al rey con este título: Representación al rey nuestro señor, poniendo en noticia de S. M. los beneficios que siguen de erigir una academia de las artes del diseño, pintura, escultura y arquitectura, á exemplo de las que se celebran en Roma, Paris, Florencia y otras grandes ciudades de Italia, Francia y Flandes, y lo que puede ser conveniente á su real servicio, á el lustre de esta insigne villa de Madrid, y honra de la nación española.
La afición a las bellas artes, el amor a la patria, el candor y la honradez, dictaron este escrito, y aunque su autor no consiguió entonces el efecto que deseaba, logró ver establecida el año de 1744 una junta preparatoria con estudio público de dibujo en la misma casa de la Panadería que el había propuesto, y ser director de ella; pero falleció antes de 752 en que se erigió la real academia de San Fernando, por la que tanto había suspirado y trabajado. Educó a sus tres hijos sobre los buenos principios que había traído de Italia; y hay un cuadro de su mano en el camarín de Nuestra Señora de Atocha [ convento de Dominicos al remate del Paseo de Atocha ], que representa una borrasca que padeció en el mar [ Menéndez ] con su familia cuando vino de Italia.
Su representación y Otras Noticias.
(Tomo III, pp. 114-117