Becerra, Gaspar
Especialidad | escultor, pintor, arquitecto |
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Fallecimiento | 1570 Madrid |
Cronología | XVI |
Ciudad de trabajo | [[Especial:Browse/:Italia, Roma, Madrid, Granada [Andalucía] Astorga, Zamora, Valladolid, Burgos Rioseco, Medina del Campo, Salamanca [León, Castilla y León], Zaragoza [Aragón], Huete [Cuenca, Castilla la Mancha]|Italia, Roma, Madrid, Granada [Andalucía] Astorga, Zamora, Valladolid, Burgos Rioseco, Medina del Campo, Salamanca [León, Castilla y León], Zaragoza [Aragón], Huete [Cuenca, Castilla la Mancha]]] La propiedad «Ciudad de trabajo» (como tipo de página) con el valor de entrada «Italia, Roma, Madrid, Granada [Andalucía] Astorga, Zamora, Valladolid, Burgos Rioseco, Medina del Campo, Salamanca [León, Castilla y León], Zaragoza [Aragón], Huete [Cuenca, Castilla la Mancha» contiene caracteres inválidos o está incompleto, por lo que puede causar resultados inesperados durante una consulta o proceso de anotación. |
Ubicación en el diccionario | Tomo 1, Página 107, Letra B, Grupo BE |
Becerra (Gaspar) escultor, pintor y arquitecto, y el que perfeccionó las bellas artes en España. Nació en Baeza en 1520, y fueron sus padres Antonio Becerra y Leonor Padilla, vecinos de esta ciudad: Viendo los grandes progresos que Berruguete había hecho en Italia, pasó allá a beber de las mismas fuentes que él había bebido, no pudiendo ser discípulo de Rafael, como pretende Palomino, porque había muerto el año que Gaspar nació; pero pudo haberlo sido del Buonarroti, aunque Vasari no recuenta entre sus discípulos.
Sea con la enseñanza, sea con el estudio de sus obras (I) o del antiguo o sea con la dirección de Vasari, a quien ayudó en la pintura en la sala de la Cancillería de Roma, en la que adquirió mucha práctica, como asegura este mismo escritor, mereció allí nombre y estimación entre tantos y tan buenos profesores, pues consiguió que una tabla pintada de su mano, que representaba a la Virgen, se colocase al lado de otra de Daniel de Volterra en la iglesia de la Trinidad del Monte de Roma. Enterado perfectamente de la anatomía del cuerpo humano hizo los dibujos (anatomía) para el libro que sobre esta ciencia publicó allí el doctor Juan de Valverde el año de 1554, que sirve de estudio a los pintores, escultores y cirujanos; y además trabajó estatuas anatómicas que andan vaciadas en manos de los profesores.
En 15 de julio de 1556 se casó en Roma con Paula Vázquez, hija de Hernando del Torneo, natural de Tordesillas, y a poco tiempo después volvió a España por Zaragoza, en donde le visitó y obsequió Morlanés el menor, escultor rico y afamado en aquella ciudad: Becerra le regaló algunos de sus diseños y un relieve en alabastro, que se colocó después en uno de los sepulcros de capilla de san Bernardo de la Seu.
Felipe II, que conocía su mérito, no tardó mucho tiempo en llamarle a su servicio, ocupándole en las obras del Alcázar de Madrid y del palacio del Pardo. Le nombró su escultor; y por real cédula, fecha en Madrid a 26 de noviembre de 1562, mando a Francisco de Murguía diese a Becerra 200 ducados a cuenta de lo que había de recibir de su salario para comenzar a trabajar: y estando S. M. en el bosque de Segovia, le nombró su pintor en 23 de agosto de 1563 por la real cédula siguiente:
“Acatando la suficiencia y habilidad de vos, Gaspar Becerra, nuestra merced y voluntad es de os recibir, como por la presente os recibimos como nuestro pintor, para que nos hayáis de servir y sirváis, y os ocupéis en todas las cosas de vuestra profesión, que por nos o por nuestros ministros en nombre nuestro os fuere mandado y ordenado; y que por el trabajo que en ello habéis, hayáis y tengáis de nos a razón de 600 ducados de salario en cada año, de más que se os han de dar de nuestra costa todos los colores y otros cualesquiera materiales que fueren menester para las obras que hiciéredes; y así mismo los oficiales y ayuda necesaria, los cuales dichos oficiales habéis vos de recibir de la habilidad que viéredes convenir, según la cualidad de la obra que hicíeredes; y los jornales que hubieren de ganar, les han de ser librados y pagados por nuestros oficiales de las obras, donde actualmente trabajárades, porque vos habéis de poner en ellas más que solamente trabajo e industria de vuestra persona. Pero queremos y mandamos que los jornales que se han de pagar a los a los oficiales que os ayudaren a las obras que hicíeredes, los comuniquéis y concertéis con nuestros oficiales, para que por todo se vea, según la cualidad de los tiempos, lo que será justo darles de jornal. De los cuales 600 ducados hayáis de gozar y gocéis desde 9 de septiembre del año pasadote 1562, que partisteis de lustra casa para seguirnos en adelante todo el tiempo que nos sirviéredes en los susodicho, con obligación de que hayáis de residir y asistir en las partes donde os mandare que hagáis tales obras, sin que por razón de la mudanza o mudanzas que hiciéredes de ir de unas partes a otras se os haya de pagar y os paguelos dichos 600 ducados. Por ende, etc.”
Y por otra cédula, fecha en el mismo lugar, día y año se concedió licencia a Becerra para ausentarse del servicio del rey y de las obras del palacio del Pardo, en las que estaba entonces ocupado, sin que se lo descontasen de su salario.
Pintó al fresco en el alcázar de Madrid el paso de la sala de audiencias a la galería de poniente, adornándole con estucos y grotescos (grutescos): representó en una cuadra los cuatro elementos(agua, viento, tierra, fuego): en un cubo de la misma galería, que formaba un semicírculo, figuró en lo alto las artes liberales (gramática, retórica, dialéctica, aritmética, geometría, astronomía y música,) y en las paredes grutescos y subientes. Y ayudado del Bergamasco pintó en la torre que miraba al mediodía, donde tenia el rey su despacho, fábulas, estucos y otros adornos de oro que llegaban hasta el suelo: todo con gran gusto, manejo e inteligencia, lo que pereció en el incendio de Navidad de 1735. Pero se conserva lo que pintó en el Pardo en la bóveda y paredes de una pieza que pertenecía a sus cuatro torres, representando la fábula de Medusa, Andrómeda y Perseo, en lo que se puede observar hasta que punto había llegado Becerra en el dibujo, en la expresión, actitudes y otras sublimes partes de la pintura: en el mismo año de 1563 se obligó a pintar un cuadro para el claustro de la catedral de Toledo, lo que parece no tuvo efecto, pues no se halla en aquel sitio, ni en otra parte de aquella santa iglesia; ni tampoco hay obras suyas en el Escorial, donde dice Carducho que también había pintado.
Se distinguió mucho más en la escultura, pues que excedió a todos los españoles que le habían precedido, y ninguno le igualó de los que le sucedieron: la infanta doña María, princesa viuda del Brasil, le ocupó en la construcción de la arquitectura y escultura del retablo mayor del convento de las Descalzas Reales (convento de Nuestra Señora de la Consolación de monjas franciscanas en la plazuela de las Descalzas) que había fundado en Madrid, y también son de su mano las pinturas (del retablo mayor) que están en él y (pinturas) en los colaterales sobre las tablas de mármol.
La reina doña Isabel de la Paz probó hasta tres veces la habilidad de Becerra con la portentosa estatua de nuestra Señora (Virgen) de la Soledad, que le mandó hacer, y que se venera en su capilla del convento de los padre mínimos (convento de la Victoria de padres de san Freancisco de Paula en la carrera de San Jerónimo) de esta corte, siendo admirable lo acaecido en su ejecución, según lo refiere fray Antonio de Arcos en la historia que publicó de esta imagen en 1640. Prescindiendo de lo que halla habido de prodigioso en este suceso, no puede dudarse de que la estatua es un prodigio del arte, porque están en ella señalados el dolor, el decoro, la ternura, la constancia, y la conformidad de la madre de Dios en su tristísima situación hasta el punto que es comprensible.
Después de haber estado en Granada, y de haber enriquecido la Castilla con su obras, acabó de ejecutar el retablo mayor de la catedral de Astorga el año de 1569. el cabildo le regaló entonces 3000 ducados de guantes y un oficio de escribano, que se benefició en 8000, después de satisfecho su trabajo, que subió con lo demás de la obra al total de 30, 000 ducados.
Por último falleció en Madrid el año siguiente de 1570, siendo aun joven, como se lamentaba Juan de Arfe su amigo. Fue enterrado en la iglesia del convento de la Victoria (convento de la Victoria de padres de san Freancisco de Paula en la carrera de San Jerónimo), en la capilla que él había comprado, llamada antes de la Cruz y hoy de la Encarnación, conforme a lo que había dispuesto en el testamento que otorgó en esta villa el año de 1568 ante Diego Méndez.
En una súplica que hizo a Felipe II a favor de su mujer, recomendó el mérito de los escultores Miguel Martínez, Baltasar Torneo, y Miguel Rivas, que le ayudaron en la ejecución de los estucos para los palacios de Madrid (Alcázar) y el Pardo. Éstos fueron sus discípulos, y también Miguel Barroso, Bartolomé del Río Bernuis pintores de Toledo, Juan Ruiz de Castañeda escultor, Toribio González arquitecto y entallador de Toledo, Francisco López pintor de Madrid, y Jerónimo Vázquez que lo era de Valladolid, los que le ayudaron en tantas obras como ejecutó, y debemos creer que muchas sean de esos mismos discípulos.
Los dibujos de Becerra rarísimos y muy estimados. Pacheco dice que los hacia con lápiz negro (San Andrés,), pero yo he visto algunos suyos con lápiz rojo. Los estudiaba y concluía mucho, considerándolos como el cimiento de la obra. Sucedió que habiéndose ocupado muchos días en hacer el Mercurio volando para la fábula de la Medusa, que pintó en el Pardo, el rey le dijo: ¿y qué no habéis hecho más que esto?. Los hacía también en cartones del tamaño de las obras que había de pintar, como lo acostumbraban hacer los grandes profesores de Italia: loable sistema poco usado entre los nuestros, y a lo que puede contribuir la decadencia del diseño en los siguientes siglos. Las obras públicas que generalmente s ele atribuyen son estas:
ZARAGOZA
LA SEU
-La lápida que representa la resurrección de los muertos en la capilla de san Bernardo
EL PARDO
PALACIO.
-Los citados frescos de las fábulas de Medusa, Andrómeda y Perseo
ZAMORA
SAN JERÓNIMO.
-Un crucifijo (Cristo crucificado) de dos varas y tercia de alto en una capilla, que está al lado del evangelio
SAN FRANCISCO
-Un esqueleto de escultura con una guadaña en la mano y la mortaja al hombro
HUETE
MONJAS DE ARRIBA.
-El retablo mayor (con sus pinturas) y los(retablos) colaterales con sus pinturas; y la adoración de los reyes (epifanía) en otro del cuerpo de la iglesia. La fachada del templo con estatuas y bajos relieves fue ejecutada por sus discípulos
MADRID
TRINITARIOS CALZADOS (CONVENTO DE LA SANTÍSIMA TRINIDAD DE PADRES TRINITARIOS CALZADOS EN LA CALLE DE ATOCHA)
-Una estatua de Cristo a la columna en un altar de la sacristía
DESCALZAS REALES (CONVENTO DE NUESTRA SEÑORA DE LA CONSOLACIÓN DE MONJAS FRANCISCANAS EN LA PLAZUELA DE LAS DESCALZAS)
-La arquitectura y escultura del retablo mayor, que consta de tres cuerpos con estatuas y relieves de mucho mérito, y las pinturas de la vida de Cristo que están en él; y el san Juan Bautista y el san Sebastián en los colaterales
LA MISERICORDIA (HOSPITAL DE LA CASA REAL DE LA MISERICORDIA EN LA CALLE DE LOS CAPELLANES)
-Un bajo relieve en piedra sobre la puerta de la calle, que representa a la Virgen con el manto extendido, y bajo de él varias figuras de rodillas
LOS MÍNIMOS (CONVENTO DE LA VICTORIA DE PADRES DE LA ORDEN DE SAN FRANCISCO DE PAULA EN LA CARRERA DE SAN JERÓNIMO)
-La pintura de la sacra familia (Sagrada Familia) y santa Catalina besando al niño, colocada á los pies de la iglesia en un altar del lado de la epístola. Un Señor (Cristo) con la cruz a cuestas en la capilla de la Encarnación; y en la suya fuera de la iglesia la imagen de la Soledad, esto es, la cabeza y manos, pues es de vestir
VALLADOLID
TRINITARIOS CALZADOS
-Un bajo relieve del descendimiento de la cruz en una de las capillas de la iglesia
PARROQUIA DE SAN MIGUEL.
-El retablo mayor de esta iglesia, que fue de los jesuitas, con dos medios relieves del nacimiento y circuncisión (de Cristo) del Señor en el primer cuerpo jónico: otros dos de su resurrección y de la venida del Espíritu santo en el segundo, corintio; y en el tercero, compuesto un crucifijo con la Virgen, san Juan, y varias virtudes y santos que adornan el basamento.
MERCENARIOS CALZADOS.
-Los evangelistas (san Mateo, san Marcos, san Lucas y san Juan) pintados en el tabernáculo del altar mayor.
GRANADA
SAN JERÓNIMO
-El célebre entierro de Cristo en un nicho del claustro, y un gracioso Niño Dios
CATEDRAL
-Un crucifijo (Cristo crucificado) del tamaño del natural en la sacristía.
TINITARIOS DESCALZOS
-Jesús nazareno en una capilla
BURGOS
CATEDRAL
-Dos estatuas de san Jerónimo y de san Sebastián en el retablo de la capilla del Condestable.
RIOSECO
SAN FRANCISCO
-Dos esculturas de la anunciación de (la Virgen) nuestra Señora y de san Miguel en una capilla interior del convento.
MEDINA DEL CAMPO
COLEGIATA
-Un excelente crucifijo (Cristo crucificado) en una de las capillas.
SALAMANCA
CATEDRAL
-La estatua de san Jerónimo penitente en uno de los cuatro retablitos, que están en una capilla
BRIBIESCA
COLEGIATA
-Santa Casildaen su retablo, y a los lados san Pedro y san Pablo con muchos bajos relieves
SANTA CLARA
-El retablo mayor de cuatro cuerpos con mucha escultura de relieves, estatuas, y medallas, que representan misterios de la vida de Cristo y la Virgen, los apóstoles (san Pedro, san Andrés, Santiago el Mayor, san Juan, santo Tomás, san Mateo, san Simón, Santiago el Menor, san Felipe, san Bartolomé san Judas Tadeo, san Matías)y los evangelistas (san Mateo, san Marcos, san Lucas y san Juan)
ASTORGA
CATEDRAL
-El retablo principal (catedral de Astorga) de tres cuerpos, con columnas dóricas el primero, corintias en el segundo y compuestas en el tercero, y con medios relieves en los intercolumnios, que figuran los principales misterios de nuestra redención (la calle central con la Asunción y la Coronación de la Virgen. Las calles laterales de arriba hacia abajo y de izquierda a derecha: Abrazo ante la puerta dorada, Nacimiento de la Virgen, Depososorios, Anunciación; siguiente grupo: Adoración de los pastores, Circuncisión, Adoración de los Magos, Presentación en el templo; último grupo: Jesús entre los doctores, Piedad, Ascensión, Pentecostés), estatuas de santos y cuatro virtudes (la Fe, la Esperanza y la Caridad, junto a la Religión y la Vigilancia) del tamaño del natural en el basamento. El tabernáculo consta de otros tres cuerpos con estatuitas y ángeles: todo trabajado con suma inteligencia y delicado gusto.
(I ) Don Pedro González de Sepúlveda conserva un pedazo del juicio de Miguel Ángel, copiado en papel con lápiz por Becerra
Junta de obras y bosques, Arfe, Butrón. Carducho, Pacheco, Felipe. Tit. ,Palomino, Archivo de varias iglesias, Ponz, Noticias de Granada, Vasri, Argote de Molina libro de la montería del rey Alfonso XI.
(Tomo I, pp. 107-116)