Beltrán, el hermano Domingo

De Diccionario Interactivo Ceán Bermúdez
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el hermano Domingo Beltrán
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Especialidad escultor, arquitecto
Fallecimiento 1590 Alcalá de Henares [Madrid]
Cronología XVI
Ciudad de trabajo [[Especial:Browse/:Madrid, Italia, Alcalá de Henares [Comunidad de Madrid], Murcia|Madrid, Italia, Alcalá de Henares [Comunidad de Madrid], Murcia]] La propiedad «Ciudad de trabajo» (como tipo de página) con el valor de entrada «Madrid, Italia, Alcalá de Henares [Comunidad de Madrid], Murcia» contiene caracteres inválidos o está incompleto, por lo que puede causar resultados inesperados durante una consulta o proceso de anotación.
Ubicación en el diccionario Tomo 1, Página 126, Letra B, Grupo BE

Beltrán (el hermano Domingo) escultor y arquitecto. Nació en Vitoria a comienzos del siglo XVI, y habiendo estudiado los principios de la escultura en España, pasó a Italia a perfeccionarse. A la vuelta recibió la sotana de coadjutor de la compañía de Jesús en Alcalá de Henares el día 21 de abril de 1561. Luego que concluyó el noviciado fue enviado a la ejecución de los retablos de los colegios de [ retablo colegio ] Murcia y [ retablo antiguo colegio Imperialcolegiata de San Isidro en la calle de Toeldo ] Madrid, que desempeñó con general aceptación. Ejecutó entonces dos [[crucifijos_[Cristo_crucificado]|crucifijos [ Cristo crucificado ]]] del tamaño natural, uno para la iglesia del colegio Imperial [ antigua iglesia de San Francisco Javier, Coelgiata de San Isidro en la calle de Toledo ], donde se venera en su capilla, y otro para lo interior de la misma casa. Aquí fue muy visitado de los grandes y aficionados, que gustaban de verle trabajar y gozar de la candidez de su conversación.


Volvió después a Alcalá a hacer el [[retablo_[colegio_Alcála_de_Henares]|retablo [ colegio Alcála de Henares ]]] de su colegio, y antes de concluirle falleció allí el día 27 de abril de 1590 de muy avanzada edad. Palomino dice que Felipe II celebraba su mérito, y que deseaba llevarle al Escorial para que trabajase algunas estatuas, lo que sospecho no se hubiese verificado por su edad y porque no se conserva ninguna de su mano en aquel monasterio.

Palomino, Ponz, Padre Alcázar. Historia de la Provincia de Toledo.

(Tomo I, p.126)