Hay otra contrata celebrada en 15 de noviembre de 64, por la que Sancho se obligaba sólo a trabajar otra [[obra_de_imaginería_para_la_cadereta_del_mismo_órgano_-_Sancho,_Jerónimo|''obra de imaginería para la cadereta del mismo órgano'']], que está delante de la silla del organista, por el coste de Cien libras catalanas. Estas obras tienen mérito y son muy celebradas en aquel principado. Tuvo un hijo y discípulo llamado tambien también Jerónimo, que residía en Barcelona, y firmaba los recibos por su padre, a quien ayudó en sus obras.