'''Observaciones:''' Sin fecha. En 1680 apareció en la Corte una niña de seis años de excepcional obesidad. De su vida se imprimieron relaciones con xilografía en Madrid, Sevilla y Valencia en 1680. En el texto se refiere como ''El rey nuestro señor ha hecho vestir decentemente al uso de Palacio, con un rico vestido de brocado encarnado y blanco con botonadura de plata y a mandado al segundo Apeles de nuestra España, al insigne Juan Carreño, su pintor y ayuda de cámara, que la retrate de dos maneras una desnuda, y otra vestida de gala…, y lo ejecutó con el acierto que siempre acostumbra su valiente pincel, teniendo en su casa a la niña Eugenia muchos ratos del día para ese efecto''. El Museo del Prado conserva dos versiones una desnuda 2ª Imagen vestida y otra vestida desnuda (2.ª 2ª Imagen). En el desnudo, la obesidad ocultada transformándola en un retrato de tipo mitológico, probablemente inspirado en modelos Rubenianos.
Procedente de la Colección Real: Real Alcázar, Madrid, pinturas desmontadas-pinturas traídas de casa de Carreño a las bóvedas de Tiziano y cuarto bajo del príncipe, 1686, s.n.; Palacio de la Zarzuela, El Pardo-Madrid, retrete de la reina, 1701, s.n.; La Zarzuela, pieza primera, 1747, nº 4; en 1827 pasó al Museo del Prado, sala 016A.
'''Observaciones:''' 165 x 108 cm. En 1680 apareció en la Corte una niña de seis años de excepcional obesidad. De su vida se imprimieron relaciones con xilografía en Madrid, Sevilla y Valencia en 1680. Juan Cabezas publicó en Madrid una ''Relación verdadera en que se da noticia de los prodigios de la naturaleza que han llegado a esta Corte, en una Niña Gigante llamada Eugenia Martínez de la Villa de Barcena, del arzobispado de Burgos''. Según cabezas: ''...Es blanca y no muy desapacible de rostro, aunque le tiene de mucha grandeza. La cabeza, rostro, cuello y demás facciones suyas son del tamaño de dos cabezas de hombre, con poca diferencia. La estatura de su cuerpo es como de mujer ordinaria, pero el grueso y buque como de dos mujeres. Su vientre es tan desmesurado que equivale al de la mayor Mujer del Mundo, quando se halla en días de parir. Los Muslos son en tan gran manera gruesos y poblados de carnes que se confunden y hacen imperceptible a la vista su naturaleza vergonzosa. Las piernas son poco menos que el Muslo de un hombre, tan llenas de roscas ellas y los Muslos, que caen unos sobre otros, con pasmosa monstruosidad, y aunque los pies son a proporción del Edificio de carne que sustentan, pues son casi como los de un hombre, sin embargo se mueve y anda con trabajo, por lo desmesurado de la grandeza de su cuerpo. El qual pesa cinco arrobas y veinte y una libras, cosa inaudita en edad tan poca...''.
Procedente de la Casa de Carreño desde 1696 a 1695 en el cuarto bajo del Príncipe en el Alcázar de Madrid; en 1700 aparece en el inventario del Palacio de la Zarzuela; según Pedro de Madrazo Fernando VII la regaló al pintor Juan Gálvez; este la vendió al infante Gabriel de Borbón antes de 1843, año en que Cook Widdrington la describe en la colección del infante confundiéndola con una obra de Velázquez, permaneciendo en su colección hasta al menos 1875 donde aparece en el catálogo de sus pinturas en Pau expuestas a la muerte del infante.