Vino a España con este soberano, quien mandó en 11 de octubre de 561 a Francisco de Murguía, mayordomo y pagador de obras del Alcázar de Madrid y casa del Pardo, pagase a Pupiler su salario y gajes a razón de 350 escudos anuales, desde 1.º de septiembre de aquel año. Representó Antonio que no se podía mantener con aquel salario por la carestía de los tiempos; y por cédula fecha en Madrid 7 de julio de 562 mandó el rey que se le pagasen los 350 escudos a razón de 900 maravedíes cada uno. Y consta por otra de 11 de junio de 566 que Pupilier [[I24Z92R8J8IU41Mpintaba_entonces_en_el_Pardo_-_Pupilier,_Antonio|''pintaba entonces en el Pardo'']].
Felipe II le dio licencia en 10 de mayo de 67 para volver a Flandes por nueve meses a [[5Y3Z3T8H7JH9OW5copiar_un_retablo_en_Lovaina_-_Pupilier,_Antonio|''copiar un retablo en Lovaina'']] con el mismo sueldo que si permaneciese en Madrid, y se le dio orden a Jerónimo Curiel, criado del rey en aquellos países, para que le comprase los colores y demás cosas que necesitase para la obra. Se ignora si volvió a España, ni se conocen aquí sus [[WV79M5L7MCS2M7Btablas_-_Pupilier,_Antonio|''tablas'']], que habrán perecido en el incendio del Prado.
''Junta de Obras y Bosques.''