Otros muchos hubo que yo pudiera poner en lista, como a Tadeo Zuccaro y su hermano Federico, archivos verdaderamente del tesoro de este arte, y otros que dejo, así por atender a la brevedad, como porque sus obras no han sido vistas por mí, y si lo han sido no las tengo tanto en la memoria, aunque ahora me representa a Julio Romano, discípulo de Rafael, o por decir mejor, otro Rafael; Lucio Romano, gran mi amigo en su última vejez, maestro de pintar grutescos por excelencia. Y en nuestra España no han faltado algunos, mas su excelencia fue más en dorados y estofados, y si algunas historias hay de ellos, es más de loar la pulideza del pincel que la materia.
''Eius est sacerdos adorans, et Ajax fulmine incensus'' '''(I)[equivocadamente numerada por Cean, corresponde consecutivamente a la nota 4]'''. No puede con todo esto competir con el retrato que Rafael de Urbano hizo de Julio II, en el cual se ve su semejanza al vivo, los terciopelos y demás ornatos que de ordinario traen los sumos pontífices, porque no se puede llegar, cuanto el pasar de allí. Pintó asimismo un incendio del palacio e iglesia de san Pedro, donde hay unas mujeres, que llevan agua para apagarlo, y otra que ha echado una criatura de un terrado por librarla del fuego, la recoge un hombre, medio vestido en los brazos, ¡divina cosa! y un hijo que saca de las llamas su padre a cuestas, y un hijo que lleva delante de sí, a imitación de Eneas y Anquises: no hay más que ver, ni que decir.
''Deprehenditur tamen Zeuxis grandior in capitibus articulisque, &c.'' '''(2)[equivocadamente numerada por Cean, corresponde consecutivamente a la nota 5]'''. Esto no se puede reprender en ninguno de los ya nombrados.
''Descendisse hic in certamen cum Zeuxide traditur. Et cum ille detulisset uvas pictas tanto successu, ut in scenam aves advolarent, ipse detulisse linteum pictum, ita veritate repraesentata, ut Zeuxis alitum iudicio tu mens flagitaret tandem remoto linteo ostendi picturam, atque intellecto errore concederet palmam ingenuo pudore, quoniam ipse volucres fefellisset'' '''(6)'''. Paréceme conseja. Él engañó las aves y engañáronle a él con la toalla pintada. Haberse engañado las aves en la capilla del Papa en algunos asientos y cornisas hechos por Miguel Ángel es cosa cierta: no por eso se hace gran caso. Tiziano retrato al duque de Ferrara, y puso el duque su retrato en una ventana, y él se puso a otra para gustar el engaño, y cuantos pasaban, pensando que era el duque, lo reverenciaban con la gorra en la mano. Y el mismo Tiziano, que es mas, estando en Roma fue a ver las pinturas que hizo Rafael en el jardín de Agustín Guigi, que ahora es del cardenal Farnesio, y en una lonja que sale a la puerta hay unos niños pintados de blanco y negro, y algunas cornisas fingidas de estuque, y no quiso creer que los niños fuesen de pintura, hasta tanto que trajo una caña y los tentó para ver si eran de bulto: tanto duró en él el engaño, que aunque otros se lo decían, no lo creía. Hízolos Baltasar Peruci de Siena.
(*) Colores en sus conchas dentro y fuera del agua.
El mármol liso, el simulacro santo.
D' el Del gran Señor la omnipotente mano,
Que las ruedas formó del ancho mundo,
Y quanto cuanto adorna el pavimento humano,
Y el mar, y quanto cuanto esconde en el profundo,
No vemos que refrena, ó o va á a la mano
De la natura el gran poder segundo,
pues todo quanto á cuanto a luz sacar le place
Acaba, y con morir su curso hace.
¿Quantas ¿Cuántas obras la tierra avara esconde.
Que ya ceniza y polvo las contemplo?
¿Donde ¿Dónde el bronce labrado y oro? ¿Y donde dónde
Átrios Atrios y gradas d' el del asirio templo,
Al qual cual de otro gran rey nunca responde
De alta memoria peregrino exemploejemplo? Solo el decoro que el ingenio adquiere Se libra del morir, o se difiere.
Solo el decoro qu’el ingenio adquiere
Se libra d' el morir, ó se difiere.
No creo que otro fuese el sacro rio
Que al vencedor Aquiles, y ligero
le Le hizo el cuerpo con fatal rocío
Impenetrable al homicida acero,
Que aquella trompa y sonoroso brio brío
D' el Del claro verso d' el del eterno Homero,
Que viviendo en la boca de la gente
Ataja de los siglos la corriente.
Como se opuso con igual aliento
El verso grande de Maron Marón divino,
Quando Cuando con paso audaz de ilustre intento
De l' la áurea eternidad halló camino:
Puso en el trono d' el del purpúreo asiento
La noble tinta del poeta Andino
Paságe, y la creciente de Numico.
LIBRO II
(I) Y aunque en la proporcion generalment
De los antiguos muchos difirieron,.
Una intento seguir, la mas corriente, '''LIBRO II'''
Que en las mayores obras eligiéron:
Yo Y aunque en la vi y observé. en aquella fuente proporción generalmente (*)
De los antiguos muchos difirieron, Una intento seguir, la más corriente, Que en las mayores obras eligieron: Yo la vi y observé en aquella fuente De perenne saber, de dé do salieron
Nobles memorias, de valiente mano,
Que ornan l' la alta Tarpeya y Vaticano. (*) Simetría del Hombre.
(I) Simetría del Hombre.
D' el Del alto de la frente, dó do el cabello
Se comienza á a espesar obscurecido,
Hasta donde adornado de su bello
El perfil de la barba es mas más crecido,
Y dó mas baxo do más bajo se avecina al cuello
En tres partes iguales dividido,
La medida será con que midieres
(I) Grande ó o pequeña imágen imagen que hicieres.(*) (*) ''Aquí faltan octavas''.
(I) Aquí faltan octavas.
Simetría El estudio no ménos y el cuidado
El estudio no menos y el cuidado (I*) Que pusiste en humanas proporciones,
Que pusiste en humanas proporciones, A qualquier cualquier animal representado
Aplicarás por partes y razones:
Al corzo ligerísimo, al venado,
Pero en particular á a los leones
Con fuerte garra y con lanudas crines,
Y cierta ley de rigurosos fines.
(I*) Simetría de los animales.
El hermoso lebrel, el crudo alano,
Y otros en grande número, que callo:
Más Mas sobre todos ten siempre á a la mano
El bizarro debuxo d' el dibujo del caballo,
Con que tanto enriquece la pintura
El aliento , caudal y hermosura.
Muchos hay que la fama ilustre y nombre
Por estudio mas más alto ennobleciera
Con obras famosísimas, dé el del nombre
Explica el artificio y la manera:
Y gloria en la presente y venidera
Edad, pasando del debuxo dibujo esquivo A descubrirnos cuanto muestra el vivo.
Á descubrirnos quanto muestra el vivo.
Que parezca en el ayre aire y movimiento
La generosa raza, dé do ha venido,
Salga con altivez y atrevimiento,
Vivo en la vista , en la cerviz erguido:
Estribe firme el brazo en duro asiento
Sin temer el horror de estruendo vano.
Brioso el alto cuello y enarcado
Con la cabeza descarnada y viva:
Llenas las cuencas , ancho y dilatado
El bello espacio de la frente altiva:
Altas sin derramarlas y parejas.
Bulla hinchado el fervoroso pecho,
Con los músculos fuertes y carnosos:
Hondo él el canal, dividirá derecho
Los gruesos quartos cuartos limpios y hermosos:
Llena f la anca y crecida, largo el trecho
De la cola y cabellos desdeñosos:
Ancho el güeso hueso del brazo y descarnado: El casco negro, liso y acopado.
El casco negro, liso y acopado.
Parezca que desdeña ser postrero,
Se le opone al encuentro; y delantero
Preceda á a todo, al esquadron escuadrón siguiente
Seguro, osado, denodado y fiero,
No dude de arrojarse á a la corriente
Rauda, que con las ondas retorcidas
Resuena en las riberas combatidas.
Si de léjos lejos al arma dio el aliento
Ronco la trompa militar de Marte,
El cerdoso cabello al diestro lado.
Tal las sueltas madejas extendias
De la fiera cerviz con fiero asaltó,
Quando Tal las sueltas madejas extendías De la fiera cerviz con los relinchos encendias fiero asalto,
El ayre y blanca nieve, á Pelio alto: Cuando con los relinchos encendías
El aire y blanca nieve, a Pelio [Pelión] alto: Las matas mas cerradas espárcias esparcías
Al vago viento igual de salto en salto,
En el encuentro de tu ninfa bella
Saturno volador delante dellade ella.
Tal el gallardo Cylaro Cílaro iba en suma,
Y los de Marte atroz iban, y tales.
Fuego espiraba l' la albicante espuma
De los sangrientos frenos y bozales:
Con ánimos y pechos varoniles
Los del carro feroz del grande AquílesAquiles;
Á A los quales cuales excede en hermosura
El cisne volador del Señor miomío, *
Que la vitoria cierta se asegura
De otro qualquiera cualquiera en gentileza y briobrío. Va delante a la nieve helada y pura En color, y en correr al Euro frío; Y a cuantos en su verso culto admira
Va delante á La ronca voz de la nieve helada y pura Pelasga lira.
En color (*) Es don Pedro Fernández de Córdoba y Aguilar tercer Marqués de Priego, con quien tuvo estrecha amistad Pablo de Céspedes, y en correr al Euro frio; cuya casa se señaló por la mejor casta de caballos, que regalaba a sus reyes. [Nota de Ceán a pie de página]
Y á quantos en su verso culto admira
La ronca voz de la Pelasga lyra.
Salve, gran madre, á a quien dichoso parto
Digno engrandece de corona y cetro,
Cuyo explendor esplendor se extiende y crece, harto
Alas Más vivo y puro que el diurno Electro:
Rendido el Persa , el Agareno y Partho
Á A su valor con sonoroso plectro,
Si cl el cielo tiene aun quien venza y quiebre
De Smirna y Roma el presumir celebre.
(*) Es don Pedro Fernández de Córdoba y Aguilar tercer Marques de Priego, con quien tuvo estrecha amistad Pablo de Céspedes, y cuya casa se seilaló por la mejor casta de caballos, que regalaba a sus reyes.
Quales en torno al carro levantado
Cuales en torno al carro levantado De uncidos Ferocísimos ferocísimos leones
Van al abrigo del materno lado
De estrellas los ardientes esquadronesescuadrones:
No menor gozo tienta el pecho amado
Ver tú salir de ti tales varones,
Cuya virtud, qual cual el celeste fuego Reluce, y más el gran marqués de Priego.
Reluce, y mas el gran marques de Priego.
Este, por quien de gloria coronada
Luz de su ilustre patria levantada
Encima á qualesquier a cualesquier merecimientos; Y es bien razón que en serlo de ella sea De cuanto alumbra el sol, y el mar rodea.
Y es bien razon que en serlo della sea
De quanto alumbra el sol, y el mar rodea.
Y si tú, grave cítara, pretendes
Seguir este subido heroico intento,
Y el valor celebrar, ¿donde ¿dónde te enciendes
Tanto, y alzar tu voz al claro asiento?
No consienten tus fuerzas lo que emprendes,
Que pocas son , y el ya cansado aliento.
Vuelve, vuelve y conoce la carrera,
Que ya tomaste, á a proseguir primera.
(I) Si enseñarte pudiese los concetos (*)
Escritos, y la voz presente y viva,
Que encierra en sí la docta prospetiva:
Como extendidos por el ayre aire y retos
los rayos salen de la vista esquiva,
Como al término llegan de su intento,
Dó Do paran, como en basa y fundamento. (*) Perspectiva.
(I) Perspectiva.
Osaré confesar que alguna parte
EL contino trabájo trabajo alcanzar puede,
Por gastar largo tiempo en aquesta arte,
Y la esperanza audaz, que al fin sucede:
De mirar donde dónde acaba y donde dónde parte
El corte de las líneas, y dó do quede
Señalado el escorzo, con certeza
En breve forma y con mayor belleza.
Acórtase por esto y se retira (I*)
El perfil, que á a los miembros ciñe y parte,
Asimismo escondiéndose á a la mira
Y desmiente á a la vista una gran parte:
Donde una gracia se descubre y mira
Tan alta, que parece, que allí l' la arte,
U O no alcanza de corta , ó o se adelanta
Sobre todo artificio, o se levanta.
(*) Escorzo.
Esto llaman escorzo introducido,
Que en la habla comun común se entienda y nombre,
De tierras extrangeras extranjeras conducido,
Traxo Trajo con la arte misma el mismo nombre:
Hora pues ni el trabajo conocido
Ni la dificultad severa pueda
Romperte el paso á a la sublime rueda.
Que ¿Qué diré de la tabla que desvia desvía
El fulminante brazo y los colores?
Vivo parece y viva fuerza envia envía
El golpe entre fingidos resplandores,
Al qual cual se rindió f la Asia y la pórfia porfía
De los Parthos huyendo vencedores;
Que con relinchos su caballo aprueba.
(I) Escorzo
Bien hay donde estender extender la blanda velvela,
Por ancho campo, donde el fin no es cierto,
Tuvo de los antiguos y concierto;
Mas miéntras mientras la intencion mas intención más se desvela
Mas Más cerca pido el deseado puerto:
Con todo descubrir el fin se debe
Del camino mas más fácil y mas más breve.
(I) Y para mayor luz sabrás, que hay una (*)
Industria, con que muchos han obrado,
Y el suceso al estudio y al cuidado:
Sus pinturas ilustres una á a una
Las colocáron colocaron en tan alto grado
Tan firmes, que la fuerza no ha podido
Del tiempo obscurecerlas, ni el olvido.
(*) Cuadrícula Harás de quatro cuatro listas bien labradas,
Que entre sí puedan encajarse, un quadrocuadro,
Y por iguales trechos señaladas
Á A la redonda sean del requadrorecuadro:
De señal á a señal atravesadas
Vayan las hebras á a encontrarse en quadrocuadro;
Qual Cual el vario axedrez ajedrez suele mostrarse
Y de ébano y marfil diferenciase.
Podrás como quisieres la figura
Entabla ó En tabla o en papel representarla,
En la qual cual se. descubra en la escultura
Un movimienm movimiento vivo en que mirarla:
De suerte la acomoda en la postura,
Que habrás despues después con tintas de pintarla, Si aspira el noble pecho a la alta gloria,
Si aspira el noble pecho á l' alta gloria, Que da de en siglo a siglo la memoria.
Que dá de en siglo á siglo la memoria.
(I) Quadricula.
El ya dicho instrumento en medio puesto